A lo largo de nuestra vida tomamos múltiples decisiones financieras. Desde pequeños gestos, como cambiar dólares a soles; hasta grandes acciones, como iniciar un emprendimiento. Sin embargo, pocas son tan intimidantes como pedir un préstamo. Al igual que tantas otras cosas, en este caso sucede también que la magnitud del riesgo (que, hay que admitirlo, es una realidad latente) termina eclipsando la amplia gama de oportunidades que puede significar.
Es por eso que este artículo está dedicado a todos los criterios y momentos clave que determinan el impacto de este compromiso. De esta manera, sabrás identificar si estás tomando las elecciones adecuadas para alcanzar tus metas financieras sin arriesgar tu estabilidad o tus proyectos a futuro.
¿Son una buena idea para atender necesidades urgentes?
Nadie está libre de emergencias o imprevistos, como reparaciones en el hogar, gastos médicos o deudas no presupuestadas. En estos casos, solicitar un préstamo puede ser la mejor decisión para aliviar la presión financiera. Sin embargo, lo primero es siempre evaluar si la situación realmente lo amerita. Buscar otras alternativas es siempre la mejor práctica.
En caso de tomarse la decisión, lo siguiente es definir con precisión la cantidad que se necesita y negociar los términos más favorables, tomando en cuenta tasa de interés, plazo de pago y condiciones del contrato. De esta manera, conocerás en detalle la naturaleza del compromiso que estas asumiendo.
¿Y para financiar un proyecto personal?
Los sueños están más allá de cualquier transacción económica, es cierto, como también lo es que la mayoría de las veces requerimos de dinero para alcanzarlos. Abrir un negocio, financiar estudios superiores o realizar una inversión inmobiliaria, son algunas de las metas que todos nos proyectamos.
Sin embargo, al momento de decidir si necesitamos pedir un crédito para alcanzarlas, lo primero que debemos considerar es la rentabilidad de la inversión. Evaluar si nuestro emprendimiento tendrá capacidad de retorno suficiente como para permitirnos saldar la deuda es imprescindible antes de tomar cualquier decisión. Es de igual relevancia diseñar una planificación adecuada y realista. Contemplar ingresos esperados, así como gastos operativos puede llegar a ser tedioso o frustrante, pero es una condición necesaria para un proyecto de éxito.
¿Debo tomar en cuenta el momento económico?
Por supuesto que sí. El contexto económico es relevante para cualquier decisión financiera, más en el caso de pedir un préstamo, puesto que este será un factor determinante para las diversas condiciones del acuerdo. Primero, en lo que respecta a las tasas de interés, ya que en periodos de expansión o de incentivos de consumo, serán bajas. En cambio, en situaciones en las que la inflación está al alza, los intereses imitarán este mismo patrón.
También importa analizar el estado general del mercado crediticio. En tiempos de incertidumbre económica, las instituciones suelen ser bastante más restrictivas al conceder financiación. Es aquí donde podemos entender con suma claridad la repercusión de mantenerse al tanto de las tendencias.
¿Qué hay de mi capacidad de pago?
Es un factor crucial. Evaluar nuestra capacidad de pagar un préstamo no debe descuidarse. Tomar este tipo de decisiones económicas de manera impulsiva no solo es irresponsable, sino también muy riesgoso. Por lo tanto, un análisis exhaustivo de nuestros ingresos y gastos mensuales es un paso vital para ahorrarnos problemas a futuro, pues nos permitirá determinar si estamos en condiciones de asumir la carga adicional. Desde aquí desaconsejamos destinar más del 30% de tus ganancias a saldar la deuda.
Finalmente, tampoco está de más considerar imprevistos, como lo son la disminución de las ganancias o los gastos inesperados. Para estos casos, tener un fondo de emergencia puede ser la alternativa más útil, pues brindará la tranquilidad necesaria para enfrentar las diversas dificultades sin incumplir las cuotas del préstamo sin afectar tu estabilidad económica.
Ahora que ya conoces cómo determinar el momento adecuado para pedir un préstamo, si también necesitas cambiar soles a dólares o viceversa para alcanzar tus metas financieras, te invitamos a visitar Cocos y Lucas. Recibe tu dinero en segundos con el respaldo del BCP los 365 días del año. No importa tu entidad financiera, seas de banco o de caja, basta solo una tarjeta VISA. Decídete y recibe un bono por tu primera operación.